SAN DIEGO — Las autoridades de salud intensificaron las vacunas en toda la región a medida que aumentaban las muertes por COVID-19. Para mediados de enero, el Condado de San Diego había registrado más de 2 mil muertes desde que inició la pandemia, mientras que en Imperial han fallecido unas 500 personas.
Las autoridades comenzaron a ofrecer las vacunas a personas mayores de 65 años el 25 de enero, y planean ofrecerlas a otros sectores en las próximas semanas. Instan a los residentes mantenerse informados sobre la disponibilidad de la vacuna.
La diócesis está ayudando a que sacerdotes de 65 años para arriba reciban la vacuna en lo que esté disponible.
Líderes de la Iglesia Católica de todos los niveles piden a los feligreses que se vacunen. El Papa Francisco y el Papa Emérito Benedicto recibieron la primera dosis de la vacuna el 14 de enero en el Vaticano.
“Creo que por ética todos deben vacunarse. No es una opción, es una decisión ética porque estás jugando con tu salud, con tu vida y con la vida de los demás”, dijo el Papa.
En Estados Unidos, los obispos a nivel nacional y estatal han emitido declaraciones alentando a la vacunación. Sostienen que las vacunas de Pfizer y Moderna:
- Son seguras y efectivas;
- Son moralmente aceptables, después de investigar su desarrollo clínico;
- Promueven el bien común, como la doctrina social católica pide a los fieles.
La diocesis comparte información sobre el COVID-19 en sdcatholic.org/covid19. La última información de las autoridades de salud sobre el virus, incluyendo la disponibilidad de las vacunas, está disponible en sandiegocounty.gov/coronavirus/; y en icphd.org/ para el Valle Imperial.
